El día de la madre

Ya sé que hoy no es el día de la madre. Pero, al fin y al cabo, actualmente el día de la madre es un invento más de El Corte Inglés para que vayamos a comprar cosas; como el día del padre, Navidades, Reyes, la semana fantástica, los 8 días de oro, la quincena excepcional, expoelectrónica, San Valentín, las rebajas... Escribo el artículo hoy, porque ayer fue el cumpleaños de mi madre. Y aunque hubiera quedado mejor hacerlo ayer, la verdad, no tuve tiempo (a quien me diga que los profesores no trabajamos le cambio mi última semana por cualquiera suya).

El de ayer no fue un cumpleaños cualquiera, que ya le ha caído medio siglo. Y con la crisis de los 50, le ha dado por correr. En realidad empezó el año pasado, pero año arriba o año abajo... Mi padre lo que hizo a los 50 fue comprarse una moto. Al final, he acabado yo corriendo y yendo casi un año a trabajar con la moto.

Para celebrarlo mis padres se fueron ayer a ver el Circo del Sol que está ahora en Valencia. Consiguieron unas entradas en primera fila el día de antes, en zona VIP. Supongo que las estarían reservadas, pero al final las liberaron. Dicen que es muy bonito, pero que como estaban en primera fila, les daba todo el humito que ponen en el espectáculo.

¿Y qué más puedo decir de mi madre? Que me cuida muy bien. Igual mejor de lo que me merezco. Y yo me aprovecho de que ahora estoy de hijo único. Si es que así no voy a querer irme de casa hasta los 30 (o los 40, que hoy por hoy, ni muchos que quieren se pueden ir de casa a los 30). Porque aunque me den el piso en verano, me va a dar mucha pereza tener que irme a vivir solo pudiendo estar a mesa puesta.

Y para acabar, y como dice el dicho: Madre no hay más que una.