Hoy nos ha tocado la lotería. En realidad sólo han sido 12 euros, jugando un décimo que cuesta 6, pero por lo menos es más de lo invertido. Aunque lo más extraño es que nos ha tocado cuando nunca jugamos a la lotería, más que en Navidad, y con la que tenemos que comprar de la banda.
Y es que, en verdad, la historia de este décimo premiado empezó en Navidades. Para el sorteo del día 22 de diciembre, el de Navidad, mi madre compró un décimo en el trabajo, como casi todo el mundo. A este décimo le tocó el reintegro, y en vez de cobrarlo, hicimos lo que se suele hacer en estos casos: cambiarlo por otro para el sorteo del Niño.
Para sorpresa nuestra, el día de Reyes, al comprobar los resultados en la web de la lotería, vimos que otra vez nos había vuelto a salir el reintegro (en realidad era más probable que en Navidad, ya que según me he enterado en el Niño hay 3 reintegros mientras que en Navidad sólo uno).
Al volver a cambiarlo, empecé a aprender más cosas respecto a la lotería: los décimos no cuestan lo mismo todas las semanas, sino que cambian de precio según sean sorteos especiales o normales. Así que como el nuevo décimo valía 12 euros, en vez de los 20 que nos tenían que devolver, sacamos 8 euros de beneficios en metálico.
En este sorteo, ya hubiese sido casualidad que volviera a tocar la devolución, y no nos tocó. Lo que nos salió fue una terminación de los 3 últimos números, con lo que el premio ya era de 60 euros. Cuando el sábado siguiente fui a cobrarlo, y a comprar otro, seguí adentrándome en el mundo del juego, y me enteré de que los sorteos se hacen a veces por la tarde, y otras veces por la mañana. Así no pude comprar otro para jugar esa semana, sino a la siguiente y a un nuevo precio de 6 euros.
Resumiendo, que se me hace esto muy largo, volvió a salir el reintegro, lo cambié de nuevo, y otro reintegro, y al cambiarlo llegamos ya al sorteo de hoy. Al final llevamos 6 sorteos seguidos, jugando con lo que nos toca en el sorteo anterior. Y como volveremos a jugar con los 12 euros de hoy, la cosa puede seguir.
La verdad es que a ver si nos toca de una vez algo gordo, o deja de salir el reintegro, que me estoy cansando de hacer viajes a la administración de lotería. Al fin y al cabo, los juegos de azar son la única inversión en la que estadísticamente sabes que vas a perder dinero. Pero que se lo digan a mis tíos, que anoche acertaron 5 números de un juego que se llama Euromillones, y han ganado casi 170000 euros. Y si hubieran puesto bien "las 2 estrellas" (sea lo que sea eso), el premio habría llegado a los 15 millones de euros.
En fin, el que no se conforma es porque no quiere. Porque el dinero tampoco da la felicidad, aunque seguramente pueda ayudar a conseguirla.
17 de febrero de 2007
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1 comentario:
Me pasó lo mismo el mes que me tocó echar la lotería de la empresa. Todo eran reintegros y premios de 8 o 12 euros que, más que nada, me servían para putearme a mí mismo y tener que jugar más veces :-/
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